lunes, 6 de julio de 2015

Problemas Ambientales

Las cataratas desbordadas como consecuencia de la deforestación.



Las inundaciones registradas en el noreste argentino afectaron no sólo las Cataratas sino al resto de las provincias de la región. Y nuevamente, la deforestación, o la tala indiscriminada de árboles, sería la principal causa de este fenómeno ya que sólo queda el 8% de la superficie originaria de bosques.
Las Cataratas del Iguazú forman parte de las nuevas siete maravillas del mundo. Miles de turistas las visitan durante el año y se quedan sin palabras al contemplar la cantidad de agua que se desplaza y cae al frente de ellos. Pero la crecida del río Paraná hizo que el espectáculo se paralizara y puso en alerta a toda la zona del noroeste argentino.
La crecida del río tomó a todos por sorpresa, tanto a los residentes como a los turistas que diariamente visitan esta atracción turística en la provincia de Misiones. Como estamos en temporada alta (abril-septiembre), los visitantes pueden llegar a trece mil por día, especialmente en el salto más visitado que es la imponente Garganta del Diablo, de 80 metros, que fue clausurado al igual que los recorridos superiores e inferiores de ese paseo.
Esta crecida es la mayor que se ha registrado, después de la padecida en 1998, dónde el agua arrasó con gran parte de las pasarelas y rampas de acceso. Para graficar este fenómeno, hay que tener en cuenta que la cantidad de agua precipitada, durante la crecida del río, alcanzó los 47.000 metros cúbicos por segundo cuando lo normal son 8.000. Los paseos del interior del Parque Nacional quedaron cubiertos de agua e imposibilitaron todo tipo de tarea de mantenimiento momentáneo. El guarda parques Fabián Sosa, jefe del Centro Operativo Cataratas, dijo que la situación fue “crítica”, ya que el agua “se llevó al menos tres tramos de pasarelas de entre 8 y 10 metros cada uno y varias columnas de soporte”. Además, aseguró que la reconstrucción “llevará por lo menos dos meses ya que ni siquiera es posible ver el mirador de la Garganta porque está tapado por el agua y no sabemos si soportará la presión o si ya está destruido”.
Como consecuencia del desborde, varios ambientalistas repudiaron los efectos de la tala indiscriminada de árboles, o deforestación, que afecta gravemente al ecosistema de la región noreste. Al haber menos de la mitad de bosque nativo, los ríos fluyen con mayor rapidez y el suelo no es capaz de absorber el caudal del agua, por consiguiente se producen inundaciones reiteradas. La deforestación es reversible si se aplica un sucesivo proceso de reforestación (plantar nuevos árboles), para evitar una erosión del suelo. Una tierra erosionada es una tierra árida e improductiva que no puede aprovecharse para ningún proceso vital, como la alimentación o producción de oxígeno. El director regional de Parques Nacionales, Andrés Bosso, aseguró que la deforestación es la causante de la inundación en las Cataratas y dijo que subsiste sólo “el 8% de la superficie originaria, hemos destruido la forestación en un 92% de la superficie y lo estamos pagando de esta manera”.
La solución al problema de la deforestación empieza por tomar conciencia acerca del efecto de nuestras acciones en el medio ambiente. Luego, podemos establecer un cambio a través de medidas simples como realizar un uso racional de los recursos naturales, reforestar árboles en nuestro barrio o en un parque y aprovechar las ventajas del reciclaje para hacer objetos útiles y amigables con el ambiente.

Estas son algunas de las imagenes de los grandes problemas que esta causando